Los hermanos Juan y Elián Soto accionan por primera vez en un mismo partido

Por Iván Acosta
Hola, ¡qué tal!
Un jardinero con una camiseta roja de los Nacionales y el número 22 de Soto calentaba en el jardín derecho del CACTI Ballpark de Palm Beaches. En el clubhouse opuesto, el de los Mets, Juan Soto se preparaba para el juego.
Los hermanos dominicanos Soto —Juan, la superestrella de los Mets de 26 años, y Elián, el prospecto de los Nacionales de 19— vieron acción en el mismo partido de pretemporada de Grandes Ligas por primera vez el jueves por la noche.
“Es genial verlo y escuchar diferentes opiniones, lo que la gente piensa sobre su swing y todo ese tipo de cosas”, dijo Juan Soto. “Fue genial verlo”.
Juan hizo el viaje con los Mets desde Port St. Lucie, Florida, para el juego como visitante, mientras se prepara para disputar juegos consecutivos de nueve entradas. Elián fue convocado desde ligas menores para el encuentro de exhibición.
“Vengo ansiando este momento desde que era niño», dijo Elián Soto. «Y espero poder hacerlo de nuevo”.
Tras el paso de Juan por la organización de los Nacionales durante siete años, que terminó con un canje masivo a los Padres en 2022, Elián firmó con Washington como agente libre internacional en 2023. Juan y su familia acompañaron a Elián al complejo de entrenamiento de los Nacionales en West Palm Beach para la firma oficial.
Un poco menos de dos años después, Juan firmó un contrato de agente libre por 15 años y 765 millones de dólares con los Mets, lo que no solo lo colocó en la misma división que su hermano menor, sino también en la misma región de Entrenamiento de Primavera. Los complejos de los Mets y los Nacionales están a solo 50 millas de distancia, lo que hace que esos equipos sean oponentes frecuentes en la Liga de la Toronja.
Esta primavera, los dos viven juntos en una casa compartida, donde, naturalmente, pasan mucho tiempo hablando de béisbol. A principios de esta semana, Juan aprovechó su día libre para ir al complejo de los Nacionales y ver a Elián entrenar en el jardín. En el pasado, también ha sacado tiempo para verlo jugar en la liga instruccional. Pero es relativamente raro que pueda observarlo en juegos competitivos.
“Es divertido, porque podemos compartir opiniones después de un día largo”, dijo Juan sobre vivir con Elián. “Es tremendo muchacho. Quiere estar aprendiendo constantemente sobre el juego y cómo van a ir las cosas. Y está aprendiendo sobre la organización.
Vengo tratando de hablar con él. Sé que la organización ha cambiado mucho. Ahora es una sensación diferente, un ambiente diferente allí. Pero estoy muy feliz por él”.
Cuando a Elián le dijeron el miércoles que sería convocado para el juego del jueves, la ansiedad se apoderó de él. Encontró una solución para superarla: irse a dormir temprano, a las 9:30 p. m.
“Pensé: ‘Tengo que dormirme porque necesito que el día pase lo más rápido posible’”, dijo Elián con una sonrisa.
Juan jugó cinco entradas el jueves, luego vio el resto desde la parte superior de los escalones del dugout de los Mets, manteniendo un ojo en el juego mientras firmaba autógrafos para los fanáticos. Elián, quien jugó en la Florida Complex League la temporada pasada, entró como sustituto en el jardín izquierdo en la novena entrada, marcando su primera participación en un juego de pretemporada de su carrera. El bateador zurdo se ponchó abanicando en cuenta completa contra el derecho Tyler Zuber.
Después del juego, los Soto se encontraron en el terreno para un breve abrazo.
“[Recordaré] ir al jardín izquierdo, correr allí y sentir lo que probablemente sintió mi hermano cuando fue a su primer juego”, dijo Elián, y agregó: “Verlo desde el mismo campo, jugar en el mismo campo es algo de lo que hablamos en la temporada baja y cuando estamos solos en casa. Hablamos mucho de eso y trabajamos para ello”.
El jueves no fue la primera vez que los hermanos se enfrentaron.
Juan subió al “montículo” en el Winterfest de los Nacionales en enero de 2020. Se preparó y lanzó una pelota grande a Elián, quien respondió con su característico Soto Shuffle. Unos lanzamientos después, Elián bateó hacia el lado opuesto contra Juan, redondeando lentamente las bases del campo improvisado para saborear su victoria fraternal. Remató su celebración con el doble gesto de Juan apuntando al cielo con ambos dedos.
Si los hermanos se salen con la suya, se verán mucho en el futuro. Aunque Elián aún no ha hecho su debut en una temporada completa, Juan tiene contrato con los Mets por 15 temporadas. Es muy posible que algún día jueguen uno contra el otro en un partido con verdaderas implicaciones.
“No veo la hora”, dijo Juan. “Hemos estado trabajando duro, esforzándonos mucho. Trabajé con él este invierno. Después de que llegó y bateó .180 en la liga de novatos, tuvo un invierno difícil, así que trabajamos bastante. De verdad se esforzó y se partió el alma todos los días, sin descanso. Así que estoy muy feliz de verlo y de lo que va a hacer esta temporada”.
HASTA LA PRÓXIMA AMIGOS